Estos datos fueron obtenidos del relevamiento que se realiza desde la Fundación Relevando Peligros de los siniestros registrados en los medios de comunicación de la provincia de Córdoba utilizando la herramienta Google Alerts.
Así, los datos arrojan que en total, fueron 43 los siniestros relevados durante el año 2023, es decir que ocurrieron un promedio de 3,5 siniestros por mes, acumulando entre noviembre y diciembre el 33% de los siniestros.
Del total a nivel provincial, el 58% fueron incendios (con pérdidas totales o parciales), el 30% muertes por electrocución y el 12% personas que recibieron descargas eléctricas. Según el relevamiento realizado, el 52% de los siniestros ocurrieron en la ciudad de Córdoba y el resto en otras localidades.
Durante el año que pasó murieron 13 personas víctimas de siniestros eléctricos. 12 de ellas recibieron una descarga eléctrica fatal y 1 murió a causa de las quemaduras provocadas por un incendio de origen eléctrico. La edad promedio de las víctimas es de 37 años y un dato no menor es que el 83% estaba trabajando – específicamente realizando tareas relacionadas con la electricidad- cuando recibió la descarga fatal. El 100% de las víctimas son hombres y del total de muertes el 25% ocurrieron en el mes de diciembre.
Las cifras más alarmantes del año pasado estuvieron relacionadas con la cantidad de operarios (7 en total) que murieron realizando tareas de mantenimiento o refacción de líneas, alumbrado público o tareas similares para distribuidoras de energía, representando el 50% de los decesos del año.
En relación a los heridos por descargas eléctricas, es importante recalcar que de las 5 víctimas, 3 eran niños cuyas edades eran 1, 5 y 7 años y que la descarga la recibieron en la vía pública: uno por entrar en contacto con una conexión clandestina, otro por entrar en contacto con cables pelados en una plaza y otro por tocar un poste electrificado.
En cuanto a los incendios, en total fueron 25, siendo el 24% con pérdidas totales y el 76% con pérdidas parciales. En julio ocurrieron el 31% de los siniestros, mientras que en noviembre el 21%, siendo ambos meses los que concentraron la mayoría de siniestros.
Históricamente julio es un mes de incendios producto de las bajas temperaturas y el uso de artefactos eléctricos para calefacción que pueden provocar cortocircuitos debido a la sobrecarga que se produce en las instalaciones eléctricas.
Desde la Fundación Relevando Peligros seguimos trabajando interinstitucionalmente para fomentar: las buenas prácticas en los trabajos relacionados con la electricidad, el uso de los elementos de protección personal, la puesta en práctica de los hábitos y protocolos de cuidado en el trabajo y el cumplimiento de las normativas vigentes. Estamos convencidos de que el camino es la prevención.
